El Consell afianza su compromiso con el cambio de modelo de intervención en la Red de Inclusión Social. La presidenta Catalina Cladera ha visitado hoy los servicios gestionados por el IMAS ubicados en Ca l’Ardiaca.

La presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, junto con la consejera de Derechos Sociales y presidenta del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), Sofia Alonso, la vicepresidenta segunda del IMAS, Magdalena Gelabert, y el director insular de Inclusión Social, Guillermo Montero, han visitado hoy los servicios ubicados en Ca l’Ardiaca para estudiar su adaptabilidad al nuevo modelo de atención centrado en la persona que se está implantando desde la institución insular.

«Hay que acabar con la estigmatización de las personas que por el motivo que sea se han quedado sin hogar. La realidad ha cambiado los últimos años y tenemos que adecuar nuestros recursos a las necesidades concretas de cada persona para facilitar su inserción social y, si es posible, laboral», ha dicho Catalina Cladera. La presidenta del Consell ha añadido que «visitas como la de hoy nos permiten conocer personalmente el funcionamiento propio de cada servicio y la opinión de los profesionales y usuarios, y eso se vuelve muy enriquecedor a la hora de estudiar nuevas fórmulas para implantar el nuevo modelo de atención personalizado en la Red».

En concreto, Ca l’Ardiaca acoge tres servicios de la Red de Inserción Social de l’IMAS: el centro de Ca l’Ardiaca mismo, que dispone de 75 plazas de baja exigencia o atención básica nocturna; sla Placeta, con cabida para 40 personas sin hogar con conductas adictivas; y Primera Acogida, también con 40 plazas destinadas a nuevas personas usuarias que se han incorporado recientemente a la Red y en donde se hace una primera valoración para asignarlas el recurso más adecuado.

En total, la Red de Inserción Social de l’IMAS cuenta con 465 plazas y durante el año 2021 atendió a un total de 1.007 personas. Aparte de Ca l’Ardiaca, Primera Acogida y la Placeta, el Consell gestiona 170 plazas en Casa de Família, 25 en el Albergue de Manacor y otros temporales en Son Ribes (18), Molinar (15) y Ruberts (12). Además, ha consolidado 70 plazas que pueden llegar a alojar un centenar de personas en los programas Housing First y Housing Led, las cuales han supuesto el gran cambio respecto del modelo residencial para las personas sin hogar porque les ofrece un hogar digno, estable e independiente con

La consejera Sofia Alonso ha recordado que «contamos con un equipo de valoración que deriva cada usuario al servicio que mejor se adapta a su perfil y necesidades reales. Se trata de optimizar los recursos en beneficio de la población más vulnerable y, por eso, desde el IMAS trabajamos en la adaptación de la Red de Inserción Social a las nuevas situaciones y para conseguir facilitar una segunda oportunidad al número mayor de personas posibles».

Además, el IMAS dispone de otros recursos para fomentar la inserción social de las personas que se encuentran en riesgo de exclusión, como las 10 plazas del servicio de reinserción social para la población penitenciaria y exreclusos o los cursos formativos para adquirir nuevos conocimientos y estimular las habilidades sociales, los cuales realizan los usuarios de la Red y que tienen como finalidad la incorporación en el mundo laboral.

Aparte de eso, la institución insular ofrece una ayuda destinada a familias en riesgo de exclusión y vinculada al seguimiento de un itinerario para la inserción socio laboral de algunos de sus miembros de entre 135 y 607 euros. El IMAS destinará a este programa un total de 2.721.000 € los próximos dos años; 1.002.000 € este año y 1.719.000 € en el 2023, y se calcula que se podrán beneficiar unas 500 familias cada año. La cantidad a percibir dependerá del número de integrantes del grupo de convivencia y de sus ingresos.